Medicación contra el estrés

El estrés y el ritmo del día, los plazos en el trabajo, los exámenes de la universidad… en fin, ¡las preocupaciones no permiten que la mente se relaje! El riesgo de acostumbrarse al estrés y a la ansiedad aumenta hasta el punto de que incluso los ansiados días de descanso pierden su efecto beneficioso.

El ritmo respiratorio cambia según nuestro estado de ánimo y nuestro estado físico. Hacer ciertos esfuerzos, por ejemplo, o estar en determinados momentos de alegría o tensión puede ser un obstáculo para el ciclo respiratorio.

Los remedios para el estrés de la abuela

COMBATIR EL ESTRÉS ELIMINANDO LA FUENTE, EL ESTRÉSLas estrategias centradas en la gestión de las “fuentes de estrés” abordan las causas del mismo. Eliminar los estresores, es decir, eliminar las causas del estrés (por ejemplo, dejar un trabajo frustrante, terminar una relación perjudicial, etc.) produce una reducción inmediata y evidente del estrés.  En los casos en los que no es posible eliminar la causa del estrés, puede ser útil gestionar el factor estresante para reducir su impacto.

Cómo tratar el estrés de forma natural

Pasar horas y horas en las redes sociales o navegando por Internet, jugar a videojuegos o ver la televisión, revisar el correo electrónico o el teléfono móvil cada dos minutos… son algunos de los “ladrones de tiempo” que reducen drásticamente nuestro tiempo sin dejarnos ningún beneficio real a cambio.

Para que entiendas un poco mejor que no estamos hablando de unos pocos minutos al día, déjame darte un ejemplo con respecto al uso del smartphone. Según un estudio de la empresa Dscout, el usuario “medio” toca la pantalla de su smartphone 2.617 veces al día, lo que supone un uso diario de unos 145 minutos.

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De este modo, predefinimos el tiempo que necesitamos dedicarnos a nosotros mismos y “bloqueamos” una determinada cantidad de tiempo para nosotros en nuestras agendas. Una vez que hemos concertado la cita con nosotros mismos debemos comprometernos con ella, de lo contrario, por supuesto, no tiene sentido.

De hecho, sólo cuando somos realmente conscientes de lo que necesitamos, podemos también buscar una forma sostenible de satisfacer mejor nuestras necesidades y evitar así que aumenten nuestros niveles de estrés.

El alto estrés que provoca

No, de nuevo, no te estoy aconsejando que te conviertas en un ermitaño y te alejes del caos de la ciudad. Pero todo científico y amante de las técnicas de meditación zen sabe que la meditación reduce la ansiedad e incluso hay estudios científicos que demuestran su eficacia.

Pero, ¿qué implica un consumo elevado de estos alimentos en particular? El aumento de peso, la cándida, el bajo consumo de energía, y cualquiera de estos problemas pueden conducir a la ansiedad y a la aparición de la depresión.

En apoyo de esta revisión científica se encuentra un estudio publicado en diciembre de 2005 en The British Journal of Psychiatry, que afirma que el aporte de grasas omega-3 ayuda a reducir los síntomas de la depresión hasta en un 50%.

Parece que reservar un poco de tiempo al día para preocuparse puede ser una estrategia útil. Así lo demuestra un estudio realizado en los Países Bajos en el que se analizó cómo las personas con trastornos de adaptación y ansiedad que programaban 30 minutos de espacio consigo mismas para pensar en sus ansiedades eran capaces de hacer frente a sus problemas.

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