Crucero fluvial por Sevilla

El Belle de Cadix, con sus 88 cabinas, está diseñado para la calma de los ríos. Su paso está restringido a una altura máxima de ola y no puede navegar más de tres millas mar adentro. Sin embargo, esta confluencia del Océano Atlántico y el río es el único medio por el que el esbelto barco puede llegar al siguiente río, al noroeste de la costa, el Guadiana.

España no es el primer lugar que nos viene a la mente cuando pensamos en cruceros fluviales, así que no debería sorprendernos que el Belle de Cadix tenga estas dos vías fluviales, poco transitadas por los cruceristas, para sí mismo.

Después de haber explorado la catedral de Santa María de la Sede y otros lugares de interés de Sevilla, me salté la visita de la primera mañana al magnífico Alcázar y me concentré en los detalles de esta ciudad: las higueras gigantes del parque, los azulejos de cerámica del barrio de Triana y las barcas de remo que navegan por el amplio canal del Guadalquivir.

La hora de la comida marcó nuestra salida. Tras superar el único juego de esclusas del río en las afueras de la ciudad, pronto dejamos atrás cualquier industria y navegamos hacia el sur por una zona de España prácticamente desconocida. De horizonte a horizonte había llanuras agrícolas planas, arrugadas sólo por algún bosquecillo y alguna construcción agrícola en ruinas. Los barcos de pesca, con sus redes de murciélago en busca de las anguilas que son un manjar local, eran nuestra única compañía en el agua.

Quizá te interese  ¿Qué se puede ver en Lugo?

Historia del río Guadalquivir

El río Guadalquivir es el río de Sevilla, el único navegable de España. Este río ha protagonizado muchos de los momentos históricos de la ciudad. En sus aguas se han librado asedios, defensas y conquistas, y desde sus orillas se han forjado hazañas y travesías.

¿Sabía que la primera vuelta al mundo partió de Sevilla? En 1519, Fernando de Magallanes navegó con sus naves hasta Sanlúcar de Barrameda y desde allí, a mar abierto, para circunnavegar la Tierra. Al cruzar el puente de San Telmo, se puede ver la esfera armilar que conmemora la milla cero de aquel viaje.

Sevilla en el siglo XVI era el centro mercantil del mundo occidental, y su río fue la principal ruta marítima del tráfico atlántico durante más de 200 años. De esa época proceden muchos nombres de calles que hacen referencia a oficios y orígenes (Alemanes, Placentines, Francos; Odreros, Toneleros, Cerrajeros…). Sevilla era conocida como “la ciudad donde late el corazón del mundo”. Su actividad marítima impregnó el comercio, la población, la cultura y su propio desarrollo urbano, haciéndola única.

Río guadalquivir

Los charcos de agua estancada de color azul claro muestran los lugares en los que el río Guadalquivir se ha desbordado en las marismas de Las Marismas en una inundación anual. Las Marismas, en el suroeste de España, fue en su día una bahía del océano Atlántico. Durante miles de años, el río Guadalquiver arrastró arena a la bahía. La eventual acumulación bloqueó la entrada a la bahía, salvo la pequeña abertura por la que el propio río desemboca en el océano. La bahía se secó y se convirtió en una inmensa marisma salada, cubierta de juncos.

Quizá te interese  ¿Qué ver en Mallorca en 4 días sin coche?

Hasta hace poco, las marismas se inundaban anualmente. Las inundaciones se controlaron cuando se desvió el agua del río Guadalquiver para la agricultura y el agua potable, y Las Marismas empezaron a secarse. En 1990, la zona se convirtió en Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. El gobierno español ha iniciado esfuerzos para preservar las marismas permitiendo que continúen las inundaciones anuales. La antigua bahía es ahora uno de los espacios naturales más importantes del sur de Europa, especialmente para las aves migratorias. En particular, Las Marismas albergan una gran población de flamencos.

Canal Guadalquivir-Sevilla

El Puerto de Sevilla es la capital de la provincia de Sevilla en Andalucía, España. Situada en la orilla oriental del río Guadalquivir, a unas 54 millas del interior de la costa atlántica, Sevilla es la ciudad más importante de Andalucía y la cuarta de España.

El Puerto de Sevilla nació hace más de 2.000 años, por lo que cuenta con un amplio y bien conservado centro histórico. Los romanos la conocían como Hispalis, y estaba cerca de la ciudad romana llamada Itálica (donde nacieron los emperadores Trajano y Adriano) que puede revelar el aspecto de Sevilla en aquella época. La Sevilla moderna cuenta con restos de un acueducto romano. La ciudad floreció bajo el dominio romano a partir del siglo II a.C., siendo su centro administrativo para la colonia Bética.

Cuando el Imperio Romano se debilitó, la zona fue asaltada por vándalos y visigodos en los siglos V y VI. En el siglo V d.C., los vándalos la utilizaron como sede de su reino hasta el año 461, cuando cayó en manos de los visigodos.

Quizá te interese  ¿Qué Virgen se celebra el 12 diciembre?

A principios del siglo VIII, los moros conquistaron la ciudad (llamándola Ixvillia) y gran parte del sur de España. En el siglo XII fue la capital de la confederación almohade, y gozó de gran prosperidad y desarrollo durante su gobierno. El Puerto de Sevilla estuvo controlado por los musulmanes hasta mediados del siglo XIII, cuando Fernando III lo retomó para la cristiandad. Sin embargo, la ciudad sigue teniendo un carácter morisco y muchas estructuras moriscas, incluidos tramos de la muralla.