Entrenamiento durante el embarazo
Índice de Contenidos
Los beneficios del ejercicio durante el embarazo están bien documentados. Numerosos estudios han demostrado que tiene un efecto positivo tanto en la salud de la futura madre como en la de su bebé. Por eso animamos a las mujeres a que se pongan en marcha durante el embarazo, ya sea nadando o corriendo suavemente.
El ejercicio durante el embarazo hace mucho más que mejorar tu bienestar: también puede contribuir al desarrollo del corazón y el cerebro de tu bebé. Si te cuesta encontrar motivación, estos datos sobre los beneficios del ejercicio durante el embarazo pueden ayudarte a empezar.
Ejercicios que deben evitarse durante el embarazo
Aunque el jurado aún no ha determinado los beneficios adicionales del ejercicio durante el embarazo, algunos estudios han demostrado que el ejercicio puede incluso reducir el riesgo de complicaciones de la mujer, como la preeclampsia y la diabetes gestacional.
Si no estabas en forma antes de quedarte embarazada, no te rindas. Empieza poco a poco y ve aumentando gradualmente tu fuerza. El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. recomienda un mínimo de 150 minutos (es decir, 2½ horas) de actividad aeróbica de intensidad moderada a la semana para las mujeres sanas que no sean ya muy activas o realicen una actividad de intensidad vigorosa.
Antes de continuar con su antigua rutina de ejercicios o de empezar una nueva, debe hablar con su médico sobre la posibilidad de hacer ejercicio durante el embarazo. Comenta con él cualquier preocupación que tengas y sabe que quizá debas limitar el ejercicio si lo tienes:
A muchas mujeres les gusta bailar, nadar, hacer ejercicios aeróbicos en el agua, hacer yoga, pilates, montar en bicicleta o caminar. La natación es especialmente atractiva, ya que le proporciona una agradable flotabilidad (sensación de ingravidez). Intenta combinar ejercicios cardiovasculares (aeróbicos), de fuerza y de flexibilidad, y evita los rebotes.
Beneficios de hacer ejercicio durante el embarazo
Descargo de responsabilidad del contenido El contenido de este sitio web se proporciona únicamente con fines informativos. La información sobre una terapia, un servicio, un producto o un tratamiento no respalda en modo alguno dicha terapia, servicio, producto o tratamiento y no pretende sustituir el consejo de su médico u otro profesional sanitario registrado. La información y los materiales contenidos en este sitio web no pretenden constituir una guía completa sobre todos los aspectos de la terapia, el producto o el tratamiento descritos en el sitio web. Se insta a todos los usuarios a que busquen siempre el asesoramiento de un profesional de la salud registrado para obtener un diagnóstico y respuestas a sus preguntas médicas y para determinar si la terapia, el servicio, el producto o el tratamiento concretos descritos en el sitio web son adecuados en sus circunstancias. El Estado de Victoria y el Departamento de Salud no asumirán ninguna responsabilidad por la confianza depositada por cualquier usuario en los materiales contenidos en este sitio web.
Entrenamiento para embarazadas en el primer trimestre
El ejercicio durante el embarazo es recomendable, pero hay que tener en cuenta algunas consideraciones de seguridad. Recuerda que el ejercicio no tiene por qué ser extenuante para ser bueno para ti. Si no era activa antes de quedarse embarazada, no debe empezar a hacer ejercicio intenso de repente. Es posible que tenga que ir más despacio a medida que avanza el embarazo.
Los cambios que experimenta tu cuerpo también pueden hacer que ciertas posiciones y actividades sean arriesgadas para ti y para tu bebé. Cuando hagas ejercicio, intenta evitar las actividades que impliquen saltos, movimientos bruscos o cambios rápidos de dirección que puedan forzar tus articulaciones y provocar lesiones.
No te acuestes boca arriba durante mucho tiempo después de las 20 semanas (5 meses) de embarazo. Esto se debe a que el peso de tu puku/embarazo presiona el vaso sanguíneo principal que lleva la sangre al corazón y esto puede hacer que te sientas débil.
Debes evitar los deportes en los que exista riesgo de traumatismo o lesión en el puku, como el kick-boxing o el judo. Las caídas también pueden provocar lesiones en tu embarazo, y a medida que tu puku crece tu equilibrio puede no ser tan bueno. Ten cuidado con actividades como la equitación y el ciclismo de montaña, sobre todo al final del embarazo. No debes bucear ni practicar deportes de altura mientras estés embarazada.