Tipos de suelo
Índice de Contenidos
Una de las bellezas de nuestro deporte es que se puede correr en casi cualquier superficie, en cualquier parte del mundo. Mientras tengas pies, puedes entrenar dondequiera que te encuentres. Pero no todas las superficies son iguales: si varías el lugar, variarás tu sesión, debido a los diferentes impactos que se producen y a las tensiones que llegan a tus articulaciones. “En verano, cuando corro principalmente sobre hierba, todo mi cuerpo parece relajarse”, dijo el bicampeón mundial de pista cubierta Marcus O’Sullivan tras ganar una carrera de una milla. El hormigón, según observó, enviaba ondas de choque a su cuerpo y era una ruta segura para el daño a largo plazo. Sólo había una forma de resumirlo: “Estoy convencido de que si corres en superficies más blandas, tu carrera durará más”. El irlandés, de 35 años, sigue mezclándose con los mejores corredores del mundo, y muchos otros corredores se han dado cuenta de que se sienten diferentes, física y psicológicamente, cuando corren sobre distintas superficies. Y aunque las preferencias de las superficies para correr son una cuestión individual, que varía de un corredor a otro al igual que las zapatillas favoritas, la siguiente guía aclarará los méritos de las distintas alternativas para que puedas aprovechar al máximo lo que tienes a tu disposición. Las mejores superficies para correr: la hierba
¿Qué tipo de suelo es bueno para las plantas?
Las hortalizas necesitan una buena tierra para crecer y cosechar de forma saludable. Una tierra bien preparada es la base de todo tu jardín y te permite comenzar la temporada. En nuestra guía sobre la preparación del suelo, te ayudaremos a conocer tu tipo de suelo, te enseñaremos a mejorar la calidad del suelo de tu jardín y a dar a tus plantas el mejor comienzo.
La jardinería no empieza con una semilla en la tierra. Comienza con el suelo. No se pueden tener plantas sanas y productivas sin un suelo rico y blando que permita a las raíces crecer lo suficientemente profundo como para absorber los nutrientes.
¿La buena noticia? Puedes mejorar tu suelo con compost y materia orgánica. Un suelo rico tiene literalmente vida propia, con actividad de microorganismos (como las lombrices de tierra) que descomponen la materia para liberar los nutrientes esenciales que necesitan las plantas. El suelo enriquecido con materia orgánica retiene los nutrientes y la humedad, pero drena bien, afloja la tierra para crear más oxígeno para las plantas y estabiliza y ancla las raíces de las plantas.
Calentar el suelo: Si vives en una región más fría, considera la posibilidad de colocar un parterre elevado para que los suelos húmedos y fríos se sequen y calienten más rápidamente. También puedes cubrir tus bancales antes de plantar con plástico negro o cartón para bloquear la luz y protegerlos de la nieve, la lluvia y la erosión.
Qué tipo de suelo es el mejor para los cultivos
“Por desgracia, los datos son contradictorios”, dice el Dr. Daniel Ferris, profesor de ciencias del movimiento en la Escuela de Kinesiología de la Universidad de Michigan. El conocimiento común dicta que la tierra y la hierba son mejores que el asfalto, que es mejor que el hormigón. La idea que subyace a esta jerarquía es que las superficies más duras provocan una mayor fuerza de impacto en el cuerpo -incluidas las rodillas- a cada paso, lo que podría provocar lesiones inmediatas o por uso excesivo.
Sin embargo, aunque hay “buenas pruebas de que correr sobre superficies más duras aumenta la fuerza de impacto cuando el pie golpea el suelo”, dice Ferris, no hay muchas pruebas de que provoque más lesiones que correr sobre superficies más blandas.
Un estudio publicado en 2008 en la revista Foot and Ankle International, por ejemplo, analizó cómo las diferentes superficies de carrera afectaban a la tasa de tendinopatía de 291 corredores de élite. En algún momento del estudio, el 56,6% de los corredores sufrieron problemas en el tendón de Aquiles, la lesión más común, seguida del dolor de rodilla, con un 46,4%. En comparación con correr sobre una superficie blanda y arenosa, correr sobre asfalto disminuyó el riesgo de tendinopatía.
Suelo limoso
Una de las bellezas de nuestro deporte es que se puede correr en casi cualquier superficie, en cualquier parte del mundo. Mientras tengas pies, puedes entrenar dondequiera que te encuentres. Pero no todas las superficies son iguales: si varías el lugar, variarás tu sesión, debido a los diferentes impactos que se producen y a las tensiones que llegan a tus articulaciones. “En verano, cuando corro principalmente sobre hierba, todo mi cuerpo parece relajarse”, dijo el bicampeón mundial de pista cubierta Marcus O’Sullivan tras ganar una carrera de una milla. El hormigón, según observó, enviaba ondas de choque a su cuerpo y era una ruta segura para el daño a largo plazo. Sólo había una forma de resumirlo: “Estoy convencido de que si corres en superficies más blandas, tu carrera durará más”. El irlandés, de 35 años, sigue mezclándose con los mejores corredores del mundo, y muchos otros corredores se han dado cuenta de que se sienten diferentes, física y psicológicamente, cuando corren sobre distintas superficies. Y aunque las preferencias de las superficies para correr son una cuestión individual, que varía de un corredor a otro al igual que las zapatillas favoritas, la siguiente guía aclarará los méritos de las distintas alternativas para que puedas aprovechar al máximo lo que tienes a tu disposición. Las mejores superficies para correr: la hierba