Lo hemos estado esperando durante mucho tiempo y finalmente parece haber llegado, aunque en más tarde de lo habitual. Es el, el caliente – de lo que por supuesto nos vamos a quejar en breve desde aquí … – lo que finalmente nos permite lucir la primera ropa de verano, salir a la calle a todas horas y empezar a pensar en playa, al mar ya las vacaciones.

Pero con el calor nuestros “antojos” alimentarios, nuestra dieta y nuestra mesa también cambian: lo fresco se convierte en el deseo recurrente de nuestro paladar. Todos pensaron lo mismo, ¿verdad?

Por supuesto, helado, el príncipe de nuestro verano, el alivio de nuestro calor y el postre refrescante por excelencia. Ya sea de chocolate, fruta, artesanal o casero, el helado es el compañero codicioso y fiel de los meses cálidos.

La curiosa historia del helado

Todo el mundo conoce el helado, pero pocos probablemente sepan que su origen deriva del encuentro, nada menos, de dos culturas centenarias como eso árabe y esoa siciliano, a finales del siglo IX. Hasta entonces, el “frío” ya se había utilizado durante algún tiempo en el sector alimentario, pero solo para la conservación de alimentos y, por supuesto, solo con las condiciones ambientales que lo permitían: hielo y nieve. Sin embargo, parece que cuando los “moros” llegaron a Trinacria encontrando el Caña de azúcar desconocido para ellos, pensaron en combinarlo con sus tradiciones ancestrales de producción de los alimentos “frescos” que crearon los primeros helados rudimentarios, básicamente fruta. La historia del helado tal como lo conocemos hoy conoce curiosamente una fecha de nacimiento muy precisa, la 1533. De hecho, fue en ese año que Caterina de ‘Medici, bisnieta de Lorenzo el Magnífico, se casó con Enrique II en París, quien se convirtió en rey de Francia unos años más tarde. La leyenda lo dice, pero aquí estamos más cerca de lo anecdótico que de la historia, que de cierto RuggeriFlorentino, que curiosamente parece haber hecho el vendedor de aves de corral y el cocinero aficionado, había ganado un concurso “culinario” organizado por la familia Medici con un dulce “fresco” que sorprendió al noble jurado, al punto que Caterina, entonces de 14 años, decidió llevarlo a París para proponer su asombrosa receta a los invitados en su matrimonio.

Quizá te interese  Cómo cuidar la piel sensible

Ideas divertidas para un helado original “casero”

Sea o no cierta esta curiosa leyenda, lo cierto es que en poco tiempo la “fama” del helado se extendió por toda Francia, antes de “volver” a Italia, que sigue intacta hasta el día de hoy. Y si disfrutar de un helado artesanal paseando plácidamente por un paseo marítimo es un placer que nos reconcilia con la vida, incluso “refrescando” a nuestros huéspedes con apetitoso y divertido helado casero es una atención que sin duda se agradecerá. Y si buscas una idea original para hacerlo, la nueva línea llega en tu ayuda. Crema fácil de Silikomart, una gama de moldes de silicona para dar a tus creaciones “semifredde” formas divertidas, clásicas u originales. En el envase de cada producto de la gama encontrarás, además de 50 barritas de comida para tus creaciones, también un recetario que te permitirá descubrir seis formas originales y divertidas de preparar helado sin la ayuda del helado. fabricante. Chocolate, menta, fruta, avellana, limón … ¡a cada uno su helado!