Cómo tener una buena higiene bucal

Tener una buena higiene bucal es esencial para todos, al igual que lo es tener un buen estado físico general. La boca, es esa gran descuidada que a veces tenemos al margen de nuestro día a día y no le prestamos la atención que se merece.

Te contamos unos pequeños consejos que puedes llevar a cabo para mantener una boca sana y bien cuidada

Cepilla tus dientes tres veces al día

Es primordial si queremos tener una higiene bucal en perfectas condiciones, entender de qué forma debemos cepillarnos los dientes, y llevarlo a cabo al menos en tres ocasiones al día durante al menos dos o tres minutos por cada sector bucal.

El cepillado debe hacerse con sentido circular y una rápida inclinación hacia arriba (si nos encontramos limpiando los dientes superiores) o hacia abajo (si estamos ocupándonos de los dientes inferiores).

Así conseguimos también cepillar y masajear las encías por dentro, evitando con ello inconvenientes como el sangrado o la inflamación de éstas.

Usa un Enjuague bucal

Un enjuague para la boca puede ser una manera increíble para conseguir la limpieza final de nuestra boca, pero debe conocerse que enjuage debemos comprar en relación con las necesidades que tengamos cada uno. Ah, también tendremos que preguntar a nuestro dentista.

Por ejemplo: los enjuagues con alcohol se desaconsejan para personas con inconvenientes de encías, puesto que su uso períodico resulta abrasivo.

En esta situación sería aconsejable un colutorio con clorhexidina.

Utiliza hilo dental

Comunmente este es el paso que menos hacemos, pero necesita la misma consideración que los anteriores. El hilo o seda dental es infaltante en el momento de limpiar intensamente los espacios interdentales, previniendo de esta forma, la aparición de sarro y caries.

Pero ten cuidado al introducirlo y moverlo entre los dientes ya que podrías perjudicar la papila interdental (ese trocito de encía que está entre dos dientes). Muévelo despacio y con cuidado y si notas que se rompe, se parte o se separan las sedas del hilo acude a tu dentista ya que puede ser síntoma de que existe una caries.

Cuida tu alimentación

Siempre que se habla de cuidado de la salud, la nutrición consigue un aspecto primordial, siendo primordial procurar que sea balanceada y diferente.

No obstante algunos comestibles, influirán en nuestros dientes manchándolos y en oportunidades ayudando a su erosión como en la situación de los cítricos.

Para evadir que se manchen o tinten, impide tomar en exceso bebidas como el café o el vino tinto y bebidas de cola.

Las fresas y las manzanas no obstante, contribuirán a sostener el blanco natural de tus dientes.

No bebas alcohol o hazlo con moderación

También hay que prestar especial atención al tabaco y a cualquier sustancia tóxica. La salud general de tu boca va a mejorar claramente.

Conseguirás unos dientes más blancos o al menos no tenderán a amarillear con el paso del tiempo por el alcohol y el tabaco. Tus encías también te lo agradecerán ya que estarán más fuertes e irrigadas, ya que la circulación sanguínea general mejora en todo tu cuerpo.

Haz una visita a tu dentista, al menos, una vez al año

Existen muchos inconvenientes o problemas de nuestra salud bucal que al final tienen una solución mucho más sencilla de la que pensamos cuanto acudimos al a consulta a un profesional.

Si descuidas tu dentadura durante un largo tiempo lo único que conseguirás será alargar el problema y sólo podrá ir a peor. Por otro lado solucionarlo te costará mucho más tanto a nivel económico como físico.

Como puedes ver es muy sencillo mantener una buena higiene bucal, con un poco de esfuerzo diario verás cómo el resultado merece la pena

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